Creando vínculos

   

   Hugo Cuesta

                                                                                         Mayo 2024

Crear vínculos es sin duda una de las actividades más trascendentes del hombre.  Se ha escrito mucho al respecto, pero no creo haya un libro que defina con más sencillez el valor de los vínculos, como El Principito de St Exupery. 

Seguramente lo has leído, y recordarás, aunque sea vagamente, la conversación del Principito con el Zorro. 

¿Qué es domesticar? Preguntó El principito “crear vínculos... "  contestó el zorro. El principito que era muy preguntón se le quedó mirando  ¿Crear vínculos? Apenas te conozco, tú eres para mí un muchacho igual a todos y no te necesito para nada. Tampoco tú tienes necesidad de mí y soy solo un zorro más entre miles. Pero si me domesticas, tendremos necesidad el uno del otro. Tú serás para mí único en el mundo, y yo seré también único para tí.

No sé si te pasó, pero al leerlo me pregunté ¿Cuántas personas son únicas para mí y para cuantos soy único? La lista con la que terminé no fue muy grande.  La siguiente pregunta obligada fué, ¿porque son únicos para mí? Y regresó a mi memoria el ejemplo del Principito, “porque he perdido el tiempo con ellos”. 

Esta es una frase que me ha acompañado desde que leí el libro. La querencia, nace de la convivencia. En este mundo hiperactivo en que vivimos con una agenda desbordada, que difícil es darse tiempo para convivir y sobre todo para “perder el tiempo” con los demás.

Si, perder el tiempo, ¡eso de lo que escribe Séneca desde hace casi dos mil años en “la brevedad de la vida” y que solo de escucharlo nos parece un pecado capital! 

Pasar tiempo con alguien es una muestra clarísima de interés y cariño.  Sobre todo en nuestras relaciones interpersonales. Si lo piensas, es lógico, la vida pasa tan rápido, que sin pasar tiempo juntos, es imposible mantenerse al tanto de las personas, y mantener así vigente nuestra relación y vivo nuestro cariño.  

Hay otra frase al respecto que recuerdo y que  también me ha marcado “el que no pierde el tiempo con sus amigos, pierde a sus amigos con el tiempo”

Y en esta ocasión también St Exupery aterriza mejor que yo esta idea cuando relata.

El zorro  pidió al Principito que lo domesticara. 

—Quisiera —, pero no tengo tiempo. He de buscar amigos y conocer muchas cosas.

—Sólo se conoce bien a quienes se domestica —dijo el zorro—. Los hombres ya no tienen tiempo de conocer nada. Lo compran todo hecho en las tiendas. Y como no hay tiendas donde vendan amigos, los hombres ya no tienen amigos. ¡Si quieres un amigo, domestícame! Ojo con esto no quiero decir que llegues a tu casa queriendo domesticar a alguien porque te vas a meter en problemas….

El caso es que al final el principito domesticó al zorro. Y al despedirse le dijo: Lloraré. 

—Es tu culpa —le dijo el principito—, yo no quería hacerte daño, pero tú has querido que te domestique...

En fin, el libro es obligado, y me quedo con el mensaje de que crear vínculos profundos es sin duda fuente de felicidad, pero también de dolor.  

Y sobre todo que el que ama tiene que estar dispuesto a sufrir, si no, su vínculo no es de verdad.

Para conocer el video completo visita el siguiente link: https://www.youtube.com/watch?v=SqqXl0sz-MU